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jueves, 22 de agosto de 2024

Paquita Gorroño la Pasionaria de Rabat

  

Francisca López Cuadrado, más conocida como Paquita Gorroño (Madrid, 5 de noviembre de 1913 - Rabat, 22 de agosto de 2017), fue una empleada de la Casa Real Marroquí, secretaria y militante del Partido Comunista Español.

Paquita Gorroño nacióen el seno de una familia acomodada, siendo sus abuelos maternos republicanos y anticlericales, quienes ejercieron sobre ella gran influencia. Las tertulias de la casa familiar de la calle San Bernabé habían sido frecuentada por compositores como Tomás Bretón o escritores como Vicente Blasco Ibáñez

En 1931 fue enviada a París para cursar sus estudios. De vuelta a Madrid, el conocimiento del idioma francés hizo que obtuviera buenas colocaciones como secretaria. La familia fue evacuada de Madrid a Valencia, donde trabajó para subsecretario del Ministerio de Instrucción Pública, Wenceslao Roces. En ese momento se afilió al Partido Comunista de España.  De Valencia pasó a Barcelona. Tras la victoria franquista, en enero de 1939 se exilió en Perpiñán.

Tras el paso por el campo de refugiados de El Bolou, marchó vía Orán junto a su marido a Rabat en el Marruecos francés. Allí trabajó como camarera, niñera y dando clases particulares a familias de la élite marroquí. Más tarde fue secretaria de dirección en el Colegio Imperial. En el ámbito del activismo comunista, durante los 40 participó en la creación de la Federación Sindical General de Trabajadores en Marruecos, promovió la unidad de anarquistas y socialistas españoles, franceses y marroquíes, recogió firmas para el indulto de presos, entre los que estaba Julián Grimau y organizó manifestaciones antifascistas en Rabat, como la del 3 de mayo de 1945, tras la caída de Berlín.

En 1955 ocupó el trabajo de secretaria e intérprete de Hassan II, manteniendo desde entonces fidelidad a la Casa Real Marroquí, pese a ser una reconocida comunista. Tras la independencia de Marruecos en 1956 participó en los trabajos de unificación de las Fuerzas Armadas Reales.

Fundó en el barrio del Océan de Rabat la Alianza de Mujeres Antifascistas junto a otras españolas exiliadas. Se ganó el apodo de la Pasionaria de Rabat por su vehemente apoyo a los presos españoles del franquismo.

En los años 70 aprendió ruso en Rabat y posteriormente realizó viajes a la U. R. S. S. 1​

Publicó sus memorias en 2013 en la Casa de España. Falleció en su casa de Rabat el 22 de agosto de 2017 y sus restos fueron enterrados en el cementerio cristiano de Rabat ,donde yace también su madre, sin ningún rito religioso, pero envuelta en la bandera de la República bajo el lema «¡Salud y República!» como último adiós. 

Mujer de una lucidez extraordinari,a y con un carácter de hierro, Paquita fue una especie de símbolo republicano español (era miembro del Partido Comunista) en uno de los países más monárquicos del mundo, lo que convirtió su vida en una paradoja. Paquita llegó a Rabat exiliada en 1939, en un país todavía bajo protectorado francés y español, por lo que asistió a la descolonización e independencia y vivió de cerca el turbulento periodo de los años sesenta y setenta en Marruecos.

Llegó a ser secretaria personal de Hasán II cuando este todavía era príncipe heredero  entre los años 1956 y 1971, y siempre guardó buenos recuerdos de aquel trabajo.Cuenta una de sus allegadas que  una vez que retornaban juntos desde París, pidió al piloto del avión que redujera la altitud y se  acercara a Madrid para que Paquita viera su ciudad natal, a la que nunca regresó. 

 Su centenario fue todo un acontecimiento, y se dieron cita en Rabat amigos procedentes de Marruecos, Francia y España, siendo además objeto de varios artículos de prensa que resaltaban lo singular de su trayectoria.



Uno de sus más allegados, el profesor español Bernabé López García, le rindió un último homenaje  al publicar sus memorias. 


https://es.wikipedia.org/wiki/Paquita_Gorro%C3%B1o
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lunes, 11 de diciembre de 2023

Saida Menebhi feminista revolucionaria y poeta




Saida Menebhinota ​ (Marrakech, septiembre de 1952-Casablanca, 11 de diciembre de 1977) fue una profesora de inglés, feminista y militante del movimiento marxista-leninista Ila l-Amam (literalemente, «Adelante»), activo durante los años 1970.


Saida Menebhi tras terminar el bachillerato, estudió literatura inglesa en la Universidad de Rabat. Rápidamente, empezó a militar en el sindicato estudiantil Unión Nacional de Estudiantes de Marruecos (UNEM) a través de su componente comunista Vía Democrática, que reivindicaba notablemente la independencia del Sáhara Occidental.1​ Durante dos años, cursó una formación de primer ciclo en el Centro Pedagógico Regional (CPR), y posteriormente enseñó inglés en un instituto de Rabat.

Se unió en la clandestinidad al movimiento marxista-leninista Ila al-Amam siendo también afiliada al primer sindicato marroquí, la Unión Marroquí del Trabajo (UMT).​


En un contexto de intensificación de la represión y de aumento del número de detenciones en Marruecos (años de plomo), Saida Menebhi fue detenida el 16 de enero de 1976 junto con otras tres mujeres, Rabea Ftouh, Pierra di Maggio y Fatima Oukacha, por sus actividades políticas en el movimiento clandestino Ila al-Amam.2​ Sufrió torturas físicas y psicológicas en el centro de detención Derb Moulay Cherif de Casablanca.nota 

Un año después, fue juzgada en el llamado proceso de enero-febrero de 1977 de Casablanca junto con otros 138 inculpados por atentado contra la seguridad del estado. Durante las audiencias, reafirmó su apoyo a la autodeterminación del pueblo saharaui.​ También denunció la opresión que sufrían las mujeres en Marruecos. Fue condenada a cinco años de prisión más otros dos por injuria a magistrado.​ Fue encarcelada en la prisión de Casablanca, en una celda de aislamiento. Aunque los demás militantes condenados en el proceso fueron trasladados a la prisión central de Kenitra, Saida Menebhi y tres de sus camaradas, Rabea Ftouh, Abraham Serfaty y Fatima Oukacha, permanecieron en la prisión civil de Casablanca.


Saida Menebhi murió el 11 de diciembre de 1977 en el hospital Averroes de Casablanca a la edad de 25 años, después de 34 días de huelga de hambre.


Saïda Menebhi escribió numerosos poemas, antes y durante su encarcelamiento, en los que denunció el régimen represivo de su país  y reflejó su esperanza en una sociedad mejor.



Su poesía, recopilada y publicada por primera vez en 1978, y luego de nuevo en 2000 y 2021, se considera un ejemplo destacado de la literatura revolucionaria y feminista marroquí

La parole haute

La parole haute, le regard perdu Tu parlais d’un monde merveilleux Qui viendra parce que nous le voulons Dans ce monde, tu disais, Les enfants ne connaîtront plus la misère, Les mères n’abandonneront plus leurs bébés, Les femmes ne seront plus battues, Méprisées, avilies.

Dans ce monde, tu disais, Les hommes ne seront plus exploités, Humiliés, opprimés. Dans ce monde, tu disais, Les peuples ne seront plus colonisés, Massacrés, exterminés. Dans ce monde, tu disais, La liberté, l’égalité, la fraternité Seront les mots de tous les jours.

La parole haute, le regard perdu Tu parlais d’un monde merveilleux Qui viendra parce que nous le voulons Et pour cela nous luttons Contre l’injustice, l’oppression, la tyrannie Contre la faim, la misère, l’ignorance Contre le racisme, le sexisme, l’impérialisme Contre tout ce qui nous empêche de vivre.

La parole haute, le regard perdu Tu parlais d’un monde merveilleux Qui viendra parce que nous le voulons Et pour cela nous mourons Mais pas en vain Car notre sang est semence Qui germera dans le sol de l’histoire Et donnera des fruits d’espoir Pour les générations futures.

La parole haute, le regard perdu Tu parlais d’un monde merveilleux Qui viendra parce que nous le voulons Et pour cela nous vivons Dans le cœur de ceux qui nous aiment Dans la mémoire de ceux qui nous suivent Dans le rêve de ceux qui nous attendent Dans le chant de ceux qui nous rappellent.




“La palabra alta”, traducido al español:

La palabra alta, la mirada perdida Hablaste de un mundo maravilloso Que vendrá porque lo queremos En este mundo, dijiste, Los niños ya no experimentarán la miseria, Las madres ya no abandonarán a sus bebés, Las mujeres ya no serán golpeadas, Despreciadas, degradadas.

En este mundo, dijiste, Los hombres ya no serán explotados, Humillados, oprimidos. En este mundo, dijiste, Los pueblos ya no serán colonizados, Masacrados, exterminados. En este mundo, dijiste, La libertad, la igualdad, la fraternidad Serán las palabras de todos los días.

La palabra alta, la mirada perdida Hablaste de un mundo maravilloso Que vendrá porque lo queremos Y por eso luchamos Contra la injusticia, la opresión, la tiranía Contra el hambre, la miseria, la ignorancia Contra el racismo, el sexismo, el imperialismo Contra todo lo que nos impide vivir.

La palabra alta, la mirada perdida Hablaste de un mundo maravilloso Que vendrá porque lo queremos Y por eso morimos Pero no en vano Porque nuestra sangre es semilla Que germinará en el suelo de la historia Y dará frutos de esperanza Para las generaciones futuras.

La palabra alta, la mirada perdida Hablaste de un mundo maravilloso Que vendrá porque lo queremos Y por eso vivimos En el corazón de los que nos aman En la memoria de los que nos siguen En el sueño de los que nos esperan En el canto de los que nos recuerdan.





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domingo, 13 de junio de 2021

Jeanne-Claude Denat de Guillebon

Jeanne-Claude Denat de Guillebon (Casablanca, Marruecos, 13 de junio de 1935 - Nueva York, Estados Unidos, 18 de noviembre de 2009)  fue parte del dúo Christo y Jeanne-Claude, más conocidos por sus obras de land art que consistían en envolver temporalmente con grandes telas y cuerdas, edificios, costas y puentes entre otros.

Ambos artistas nacieron el mismo día, 13 de junio de 1935. Mientras Christo nacía en Bulgaria, Jeanne-Claude lo hizo en Marruecos debido a que su padre francés estaba como general en la zona.
La pareja de artistas se conoció en 1958 en París, cuando su madre vió por casualidad un retrato hecho por él en la peluquería, y lo invitó a hacerle uno a su departamento. Jeanne Claude pensó que Christo era un mendigo, hasta que él la invitó a conocer su taller, dónde él ya tenía cosas envueltas en tela, como latas, botellas, zapatos y sillas. Si bien ella pensó que estaba en el departamento de un loco, se enamoraron y juntos comenzaron a realizar los proyectos que los hicieron famosos. Se mudaron a Nueva York en 1964 donde comenzaron a envolver cada vez cosas más grandes, hasta que en 1969 lograron envolver la costa de Little Bay en Sydney Australia, lo que tuvo un impacto positivo en el lugar y el público.


Tras años, y a veces décadas de espera de gestiones, lograron realizar intervenciones como envolver el Pont Neuf en 1984; el edificio del Reichstag en 1995 luego de convencer al Parlamento alemán; y las costas de un archipiélago en Miami entre muchas otras obras. Juntos se transformaron en una dupla inigualable del land art temporal, tomando prestados espacios y edificios, cubriéndolos y forrándolos de tela, atrayendo a miles de turistas a conocer obras que no tienen igual en la historia del arte. Lograron financiar los 18 proyectos que alcanzaron a realizar juntos, los que superaban presupuestos de millones de dólares, vendiendo los bosquejos de las intervenciones, nunca con patrocinadores.

Porque pensaban que sería más fácil establecerse en el mundo del arte con un solo nombre como autor, todos los primeros trabajos de esta dupla fueron atribuidos a Christo, hasta que en 1994, fue él mismo quien corrigió retroactivamente que la autoría de todo el trabajo también debía llevar el nombre de Jeanne Claude.

En 2005 realizaron su obra más extensa, planeada durante 25 años: “The Gates”, 7053 portales, con una cortina color azafrán, repartidos en el Central Park. Como siempre se financiaron completamente solos, sin ayuda de la ciudad y donaron todas las ganancias de los souvenirs de las obra a una caridad. Al momento de su muerte, Jeanne Claude estaba trabajando en un proyecto que estaban gestionando desde 1992: cubrir 6 millas del río Colorado en Arkansas con tela brillante y traslúcida.

Jeanne-Claude falleció el 18 de noviembre de 2009 en Nueva York, a causa de un aneurisma.​ Tal como era su deseo, su cuerpo fue donado para investigaciones científicas



https://mujeresbacanas.com/jeanne-claude-1935-2009/
https://elpais.com/diario/2009/11/20/necrologicas/1258671601_850215.html
https://elpais.com/elpais/2018/03/27/seres_urbanos/1522161279_329789.html
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martes, 19 de noviembre de 2019

Najat el Hachmi escritora


Najat el Hachmi (Nador, Marruecos, 2 de julio de 1979) es una escritora española de origen marroquí. Licenciada en filología árabe por la Universidad de Barcelona, obtuvo el Premio Ramon Llull de novela en 2007 por L'últim patriarca (El último patriarca). Con anterioridad había escrito el ensayo, Jo també sóc catalana (2004), donde trata de la integración en la cultura catalana de los inmigrantes y en 2015 ganó el Premio Sant Joan de narrativa. También ha sido colaboradora en diversos medios de comunicación como Catalunya Ràdio, El 9 Nou de Vic y en La Vanguardia.

Nació en la ciudad marroquí de Nador y a los ocho años se trasladó a Vic donde residía su padre, que emigró antes de que ella naciera a Cataluña. En Vic creció y realizó sus formación académica hasta llegar a la Universidad de Barcelona donde estudió filología árabe.

También tuvo diversas ocupaciones: empleada de la limpieza, cocinera, monitora de deportes y mediadora de la Delegación de Enseñanza de Vic donde trabajaba cuando presentó en 2004 su primer libro: Yo también soy catalana.​ Escrito en catalán y posteriormente traducido al castellano, se trata de un texto autobiográfrico en el que abordó en profundidad su experiencia como inmigrante, la cuestión de la identidad y su proceso de arraigo en Cataluña, la lengua, la religión, las mujeres, el sentimiento de pérdida hacia Marruecos y su relación con el país de adopción.

Escribe desde los once años, al principio como entretenimiento, pero poco a poco la escritura se fue convirtiendo en una vía para canalizar la inquietud de sentirse de dos sitios a la vez y en una manera de acercar estos dos mundos a los que pertenece.


El éxito le llegó en 2008 con El último patriarca que recibió el Premio Ramon Llull, el Prix Ulysse a la primera novela 2009 y fue finalista del Prix Méditerranée Étranger 2009. En el libro la autora ajusta cuentas con el machismo y la violencia de los jefes de familia anclados en el conservadurismo y la tradición por encima de todo, en contraposición con la historia de su hija, joven que busca la libertad desprendiéndose de un legado social que no ha elegido..​ El libro ha sido traducido a numerosas lenguas, entre ellas el inglés, francés, italiano, portugués, turco, rumano y árabe.

En 2011 publica La cazadora de cuerpos en el que la escritora da un giro a su obra con una novela erótica en la que relata la historia de una mujer que necesita cazar todo tipo de cuerpos –inmigrantes, compañeros de trabajo, ligues de discoteca o un revisor del tren, entre otros– para liberarse.



En 2015 publicó La hija extranjera con la que logró el Premio Sant Joan de novela, el tercer galardón literario mejor dotado en catalán y cuyo argumento se centra en el conflicto de identidades entre una madre y una hija.​

https://es.wikipedia.org/wiki/Najat_el_Hachmi
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domingo, 1 de septiembre de 2019

Touria Chaoui primera aviadora marroquí


Touria Chaoui​​  ( Fez , 14 de diciembre de 1936  en la ciudad de Fez, Marruecos -1 de Marzo de 1956)  con 16 años se convirtió en la primera mujer piloto de Marruecos.


Cursó sus estudios de educación primaria en An-Najah en poder de los nacionalistas, finalizando en 1949. Continuó la secundaria y cursos de taquigrafía árabe hasta el año de 1949 para los cuales se mudó a Túnez. Touria mostró un especial interés por el mundo aeronáutico desde temprana edad.

A la edad de trece años tuvo un papel pequeño en una película "La séptima puerta" del cineasta francés André Zwobada dicha incursión se desarrollo con la ayuda de su progenitor Abdelwahed Chaoui el cuál fue escritor, director y actor.


Abdelwahed Chaoui apoyó las aspiraciones de su hija matriculándola en la escuela Tit Mellil de Casablanca​​, aunque fue difícil en un principio debido a que Marruecos se encontraba en una situación de protectorado y dichos estudios estaban reservados para la élite francesa de aquella época y para el genero masculino. Finalmente en el año de 1952 y con dieciséis años se convirtió en la primera piloto mujer en Marruecos y segunda del mundo árabe tras la egipcia Loftia Elnadi.

A lo largo de la historia han existido un sinnúmero de mujeres que han buscado desarrollarse dentro del campo aeronáutico como la icónica Amelia Earhart, Geraldine Hardman​ y Alia Twa la primera mujer instructora en la zona de Jordania.

Como ellas existen muchas mujeres formándose en la actualidad gracias a organizaciones como la Amelia Earhart Memorial Scholarships and Awards (AEMSF).​



 Touria se tituló a una temprana edad como piloto recibiendo infinidad de felicitaciones, en particular de las organizaciones conformadas por mujeres. Recibiendo hasta fotografías autografiadas como la de Jaqueline Auriol, quien fue piloto de pruebas.

El 1 de Marzo de 1956 mientras volvía de una asociación de trabajo social, fue asesinada frente a la casa de su familia con un tiro en la cabeza. Se culpó a Ahmed Touil.

Existieron varias teorías, algunas hacían referencia a la inhóspita situación que las mujeres vivían en aquella época al querer ejercer ciertos derechos o  a un feminicidio ya que Ahmed se decía estaba enamorado de ella. Finalmente las causas reales nunca fueron aclaradas.

https://es.wikipedia.org/wiki/Touria_Chaoui
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jueves, 20 de septiembre de 2018

Youssra Ouka, Soultana de Marruecos


 Youssra Ouka, nació en 1985 en el barrio de Ain Sabaa en Casablanca, Marruecos. Comenzó su carrera en solitario en 2010. 

En un contexto regional, en el que continúan las luchas intergeneracionales por la igualdad de género, la rapera marroquí Youssra Oukaf, popularmente conocida por su nombre artístico Soultana, es una voz intransigente de la disidencia.

Usando su letra como plataforma, apoya a los movimientos por la igualdad de  género y la justicia social en Marruecos en unión la organizaciones  feministas  bases para el cambio.

A través de su  trabajo y su arte representa un desafío creativo frente a  las corrientes políticas y religiosas conservadoras, Soultana define el rap como un medio para "hablar sobre temas: pobreza, violencia, abuso, contradicciones sociales" .

Al mantener la tensión entre el desafío de la discriminación basada en el género y el orgullo vocal por su identidad y sus raíces, se ha ganado el respeto y el apoyo de un público fiel en Marruecos y más allá.




En respuesta a un entorno mediático en el que gran parte de la cobertura de Medio Oriente y África del Norte perpetúa los estereotipos reduccionistas de género, Soultana narra las luchas de las mujeres que están activas en movimientos por la igualdad, la emancipación y el cambio político.

Resueltamente no comercial, su coherencia al hablar la ve experimentando momentos de precariedad, al igual que otros artistas emergentes que reciben poco apoyo o financiación.

"Ser una artista árabe es ser consistentemente fuerte: vivir con orgullo. Trabajar con recursos limitados y, a veces, derechos limitados, pero continuar amando, luchando, creando ", reflexiona.

Aunque se enfrenta a censuras sociales y políticas esporádicas en Marruecos, la vocalización de Soultana de su identidad como mujer y letrista marroquí matizada y autoritaria es una fuente de inspiración para muchos y su trabajo ha servido como mentor para los MC emergentes más jóvenes .

Reflexionando sobre su trabajo y sus fuentes de fortaleza emocional, explica: "Me he enfrentado en tiempos difíciles, personal y profesionalmente, pero como dicen, 'lo que no te mata te hace más fuerte'. Todo todavía me da esperanza, aunque trato de mantener viva mi esperanza en un mundo diferente. Quiero ver un cambio en este mundo: encender la televisión y no mirar más guerras, bombas, pistolas.

"Por supuesto que quiero ver la democracia, la libertad de expresión, el acceso a la atención médica, la felicidad, el amor, la amistad, pero todo esto se puede resumir diciendo  solo que quiero ver que las personas  puedan vivir con dignidad".



http://mujerdelmediterraneo.heroinas.net/2011/05/otras-voces-de-mujer-del-mediterraneo.html
http://revolutionaryarabraptheindex.blogspot.com.es/2012/02/soultana-sawt-nssa-voice-of-women.html
http://www.broadsheet.ie/2018/02/21/lyrical-dissent/

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lunes, 4 de diciembre de 2017

Fátima Al Fihri, fundadora de la primera universidad del mundo



Fatima Muhammad Al-Fihri (? – 880) (apodada Oum al Banine, que significa "madre de los chicos") fue una mujer árabe y musulmana conocida por fundar la primera institución de educación superior del mundo, aún operativa en la actualidad y conocida como Universidad de Qarawiyyin en Fez, Marruecos.

Fatima Al-Fihri era la hija de un comerciante árabe  importante hombre de negocios de la época que se trasladó con su familia desde Túnez a Marruecos en la época del reinado marroquí de Idris II.


Heredó una acaudalada fortuna tras la muerte de su esposo y hermanos, por lo que, junto con su hermana Mariam, decidieron invertir su dinero en un proyecto que contribuyera a impulsar un mayor desarrollo en su comunidad. Edificaron una Madraza donde se comenzó a reforzar la educación de jóvenes y, alrededor del s. X d.C., la madraza ya se había convertido en un importante motor intelectual del país.

En el año 859, Fatima fundó la primera Universidad del mundo, aún hoy operativa, la Universidad de Qarawiyyinn en Fes, Marruecos. Dicho centro educativo está considerado como un importante núcleo intelectual del Mediterráneo. Su excelente reputación atrajo a pensadores como Gilberto de Auvernia para estudiar allá. Este pensador luego será el Papa Silvestre II, célebre por introducir los Números arábigos en Europa, junto al concepto cero.

La hermana de Fátima, Mariam, es conocida por colaborar económicamente en la construcción de la mezquita Al-Andalus de Fez
La Universidad El Qarawiyyin

La Universidad El Qarawiyyin se encuentra en la ciudad marroquí de Fez, y fue fundada en el año 859 D.C., más de dos siglos antes que la Universidad de Bolonia, la más antigua del mundo occidental, y que Oxford, la más antigua del mundo angloparlante. Salamanca, la más antigua de España e Iberoamérica fue fundada 359 años después. El Qarawiyyin es, según la Unesco, la universidad más antigua del mundo.

La Universidad de Al-Qarawiyyin era considerada el instituto más importante del norte de África, pues fue un lugar que tuvo grandes influencias políticas, religiosas y educativas. Importantes personajes de la historia estudiaron alli. 

En 2012 su biblioteca tuvo una importante restauración, donde aproximadamente 4, 000 libros que se encontraban en mal estado fueron tratados. Dicho trabajo fue realizado por la arquitecta Aziza Chahouni, la cual, por cierto, tuvo dificultades para hacerlo debido a estereotipos sexistas y machistas. 


https://www.youtube.com/watch?v=NGZRig4XJbA
https://theurbanmuslimwomen.wordpress.com/2008/08/04/fatima-al-fihri-founder-of-the-oldest-university-in-the-world/
https://www.americaeconomia.com/analisis-opinion/fatima-el-fihri-fundadora-de-la-primera-universidad-del-mundo


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domingo, 4 de diciembre de 2016

Lamiae El Amrani poeta marroquí


Lamiae El Amrani es una poeta marroquí en lengua española, nacida en Tetuán el 1 de marzo de 1980. Es licenciada en Lengua y Literatura Hispánica por la Universidad Abd al-Malik al-Saadi de Tetuán y doctoranda en el Departamento de Periodismo de la Universidad de Sevilla. Forma parte del pequeño colectivo de escritores marroquíes que utiliza el español como lengua literaria, aunque parte de la obra de Amrani ha sido publicada también en traducción al árabe. 
Lamiae El Amrani se siente heredera de los grandes poetas árabes contemporáneos, y en especial de Nizar Qabbani, Adonis o Nazik al-Malaika, pero reconoce asimismo influencias de Lorca, Miguel Hernández o Juan Ramón Jiménez. Forma parte del elenco de escritoras encabezado Fatema Mernissi, que intentan visibilizar las voces femeninas en el panorama literario marroquí, de claro predominio masculino.

Hoy en día es la primera poeta marroquí en escribir en castellano. Sus recitales bilingües –árabe, castellano- la llevan frecuentemente a países latinoamericanos como Brasil, Chile y México.



APUNTES PARA LA MEMORIA


Una taza de café sobre la mesa,

una silla coja,

un tapiz medio roto,

y su memoria borrada

a golpe de fuego .

Ella escribe cartas ,

sobre un techo agujereado

por la dureza del tiempo .

En su cara se dibujan caminos

gastados por la lejía,

y sigue escribiendo

con tiza sobre ese techo blanco,

a escondidas de su memoria.




Ha Colaborado en la radio intercultural Wahatu Al Andalus .

Ha publicado Las plaquettes: Verde mar sin alas (Col. "Cuadernos de Mayo», ; Ayuntamiento de Cartagena, 2007). Un Suspiro inapreciable de una noche cualquiera (Cuadernos "Leído en el Carmen de la Victoria", Universidad de Granada, 2007) y Lanzas desde una orilla del alma ( Colec. Poesía en el Campus. Edits. Universidad de Zaragoza e Instituto de Estudios Islámicos y del Mediterráneo. Zaragoza, abril 2008).

Ha publicado el libro Tormenta de especias (ed. bilingüe árabe-castellano). Colec. Lancelot, nº 7. Ed. coaatmu,2008.

Así mismo ha publicado poemas, traducciones y artículos en diversas revistas: " Poemas " (Barcarola, 68-69, Albacete, 2006), "Mujer y Poesía en Marruecos " (en Actas de las Jornadas de Cooperación Cultural Hispanomarroquí, Algeciras, 2006), "Paraíso de especias " (Barcarola, 70, Albacete, 2007),), "Literatura escrita por mujeres en el Marruecos actual " (en Escritoras y Pensadoras Europeas, Sevilla, Arcibel Editores, 2007), " La Educación: Motor del cambio de la mujer marroquí " (en Mucho Mas Mayo, Festival de Jóvenes Talentos, Cartagena, 2007), " Poemas " (Lunas de Papel, Molina de Segura, Murcia, nº. 1, otoño-invierno 2007-2008), " Poemas " (Antaria: Poesía, artes visuales, narrativa, pensamiento, núm. 7, 2007). Traducción al árabe junto Nadia El Amrani de ' Cinco poemas de Javier Marín Ceballos' (Barcarola, 71-72, Albacete, abril, 2008).

También ha publicado en páginas web: "Poemas" (El Coloquio de Los Perros: Revista Electrónica, nº18, 2007,http://www.elcoloquiodelosperros.net /espanola18lam.htm); "Elestrecho" y "Retrato de un Viaje", 02/05/08, enwww.marruecosdigital.net/xoops/modules/wfsection/article.php articleid=2189; y "Susurros apasionados bajo un candil de versos", 2008, en www.argancultural.com /lamiae_el _amrani.htm. 

http://cuadernodepoesia.org/revista5/Lamiae_%20El-Amrani.html 
http://www.casaarabe-ieam.es/noticias-arabes/show/23-de-abril-de-2008-casa-arabe-abre-su-sede-de-madrid-en-la-noche-de-los-libros 
http://cuadernodepoesia.org/revista5/L.El-Amrani_poemas.html 
http://www.lamiaepoesia.com/lamiae.html
http://www.casadellibro.com/libro-tormenta-de-especias/9788498366358/1705039
http://mujerdelmediterraneo.heroinas.net/2012/05/lamiae-el-amrani.html
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martes, 16 de agosto de 2016

Alicia González Díaz escritora


Mi nombre y apellidos: Alicia González Díaz. Nací el once de octubre de 1941 en Larache (Marruecos), ciudad donde transcurrieron mi infancia y adolescencia. Junto a mi familia, me trasladé en 1958 a Granada, donde resido. Estoy casada, tengo tres hijas y cuatro nietos. Mis lecturas favoritas son textos de autoras. Admiro el verso profundo de Gabriela Mistral y la prosa sencilla de Susana Tamaro. He publicado seis libros. En la actualidad trabajo en la corrección de mi última novela. (Nos decía en una publicación en la página de Sergio Barce, enero 2013.

Traemos el texto publicado en la misma  página  y  fecha , escrito por Alicia :

TRINA

En la cuadrada habitación de techo plano pintado de ocre y friso de vieja escayola, un gran ventanal con alféizar repleto de tiestos cuajados de geranios que abarcan todas las tonalidades de los violetas, desde el malva hasta el morado oscuro, deja entrar la sesgada luz solar y el sonido de las campanas de la cercana iglesia que con su alborotado repicar proyectan un regusto alegre, delicioso.

Junto a este ventanal, Trina se entrega con entusiasmo a escribir poesía tecleando en la vieja “UNDERWOOD” que hay sobre su mesa de trabajo. Escribe versos, y hasta cuando los está escribiendo piensa que son malos, sin valor. Pero, aún así, experimenta un hondo placer al escribirlos.

Trina siempre ha vivido una existencia un poco bohemia; un plano de vida absolutamente al margen de los convencionalismos y las responsabilidades y sin que el dinero resulte prioridad, vistiendo ropas sencillas y calzando gastadas sandalias pretorianas, viviendo en un barrio humilde, en un pisito de la calle Calderería, limpio y casi desnudo, rodeada de muebles deslucidos, de paredes adornadas con algunas láminas dibujadas a carboncillo, y de la fría soledad. Para Trina esta clase de vida es una especie de cuento de hadas que colma plenamente su espíritu.

Le es fácil ser feliz, en casi todo. Encuentra belleza en la luz, en el color de los lirios del valle, en todos los sonidos y ruidos, como los gritos de los vendedores ambulantes pregonando su mercancía en la calle, las voces de los niños besándose en el aire,  las notas arrancadas a un acordeón por un músico aficionado y en el olor a canela de la flor de las petunias.

Hace algún tiempo, Trina consideró la posibilidad de establecerse en otro sitio; sitio en el que había nacido y pasado su infancia. Esta idea se le había ocurrido de repente durante una noche de insomnio, pensando que en aquel lugar podría establecer fácilmente su identidad y gozar de la compañía de algunos parientes. Sería un intento arriesgado, pero resultaba agradable pensar sobre ello; era como soñar en desviarse de los caminos mil veces andados y liberarse de la rutina.



Portando una vieja maleta, un lunes por la mañana, muy temprano, salió de su casa en el arrabal y atravesando el centro de la ciudad se dirigió a la estación del ferrocarril. No había viajado desde que estuvo en el Este, aproximadamente quince años atrás, para visitar a la familia de una prima. Ahora, su viaje de poco más de trescientos kilómetros le daba una sensación de novedad al mismo tiempo que la trasportaba a un mundo de nostalgia.

Los largos raíles tendidos sobre la grava brillaban como plata bruñida en toda su extensión bajo las ruedas del tren. Trina, cansada de escuchar las vulgares frases de su compañero de viaje con las que pretendía fomentar una conversación, se abstrajo en la contemplación del paisaje otoñal a través de los cristales de la ventanilla del vagón.  Veía las tierras onduladas por el arado, pendientes cubiertas de trémula hierba y lirios abiertos, matojos, piedras, vetustas encinas endurecidas por su resistencia al tiempo y a los elementos; de vez en cuando, un pueblecito blanco andaluz extendido en la ladera aparecía y desaparecía en la lejanía. Bajo el cielo gris, las aves rezagadas en su viaje hacia África volaban a bastante altura en perfecta alineación en forma de “V”.

Esto de ir de aquí para allá lo enjuiciaba Trina, criatura acostumbrada a permanecer largo tiempo en un mismo lugar, como algo desorbitadamente importante y desordenado. Por eso, la inquietud invadía su cabeza y su corazón por partes iguales cuando, silbando, la locomotora atravesó con estrépito los aledaños de la estación término y, entre rítmicos jadeos, se paró junto al andén.  

Trina bajó del vagón y se quedó unos instantes observando a los demás pasajeros que habían viajado en el mismo tren, marchando deprisa hacia la puerta de salida cargando sus pesados equipajes. El efecto fue extraño, experimentando una sensación de desencanto. Se sentía cohibida y tímida, sola entre el gentío, en un lugar donde había vivido durante años y del que guardaba un vago recuerdo, mas hacía tanto tiempo que no había estado allí que aquella estación le parecía algo ajeno a su vida. No sabía la razón, pero algún sentimiento escondido en su interior despertaba en su alma cierta congoja, una chispa de desazón.  

En medio de la pequeña muchedumbre que invadía el andén y de la niebla que le envolvía el ánimo, una indecisión interna la mantenía quieta junto al tren que antes de una hora partiría hacia el Sur, pensando que podría muy bien sacar billete y volverse a Granada. Sintió la imperiosa necesidad de hacerlo. ¡De acuerdo! –se dijo para sus adentros– y siguiendo aquel ardiente impulso suyo automáticamente subió a uno de los vagones, sin olvidar su maleta. Dos horas más tarde emprendía el regreso hacia su lugar de partida.

Sentada de nuevo junto a la ventanilla, viendo la parte del paisaje que pasaba delante de sus ojos un instante y luego se perdía hacia la lejanía, Trina encontró la respuesta concreta y concluyente al interrogante íntimo del motivo de su súbita decisión de regresar: en realidad, dondequiera que uno estuviese, las cosas importantes de la vida eran escasas y los años terminaban por borrar todo…, palabras, recuerdos, afectos y vínculos familiares. A ella no se le ocurrían más razonamientos persuasivos.  

Fue anocheciendo insensiblemente, el sol se había puesto y las sombras se instalaban tímidamente sobre aquella parte de la tierra. El viaje tocaba ya a su fin. Trina llegó a su destino, del que había partido aquella misma mañana, y el último resplandor del día, le causó el efecto de un umbral que abriera paso a todas las esperanzas. El mañana era nuevo y el corazón dispuesto siempre a latir con ímpetu. Trina estaba convencida de haber hecho lo correcto.    


De nuevo tenemos a Trina instalada en el pisito del arrabal. Es feliz…, ¡ah, sí, ahora se siente capaz de aceptar cualquier reto! Ha vuelto a colocar tiestos en el alféizar de la ventana y a plasmar versos tecleando con sus hábiles dedos en la anticuada máquina de escribir. Improvisa con mucha facilidad y en los endecasílabos de sus sonetos, llenos de sensibilidad y refinamiento, no hay ese trasfondo donde se adivinan las frustraciones y el grito de dolor de un alma que no ha podido olvidar.

Pero Trina no sólo escribe versos. Sus relatos, cálidos y sencillos, señoreados intelectualmente por la influencia de alguna escritora célebre, ponen de manifiesto una inteligencia superior y, sobre todo, una ternura susurrante y generosa. Sus personajes, extraídos de la realidad, son gente del pueblo, el verdadero pueblo humilde y trabajador con sus vicisitudes y miserias y que ella reconoce en el tendero de ultramarinos que hay en su calle, en la mujeruca que va de aquí para allá ofreciendo limones y perejil a los transeúntes mientras lleva “en jarras” sobre su cadera al chiquillo desarrapado y mocoso, en los hombres que para el bien de la comunidad tienen que desempeñar tareas ingratas, en el estudiante, en la tullida que al andar parece tener los pies de plomo y que enseña en una escuela nociones elementales a un montón de niños, en el cobrador de recibos, en el vendedor de lotería, en la pantalonera que tiene su humilde taller en un pequeño y umbrío local y que es ayudada en el oficio por su madre octogenaria, en el cartero que reparte la correspondencia entre los vecinos, en el sacerdote que junto al altar con olor a flores toma cada día el pan y el vino en la misa.

Trina observa a estos tipos, los examina, reflexiona sobre ellos, aprende su lenguaje, las palabras malsonantes, las cancioncillas, las maldiciones y, también, las oraciones de esta gente de la que ella nutre de personajes sus relatos; relatos plenos de alegría burlona, de hechizo, de fábulas y sueños en un mundo feliz y fantástico donde viven criaturas a las que Trina contempla desde el misterio de su mundo interior.

Entabla conocimiento con escritoras jóvenes; de esas que “prometen”.  Algunas con ciertas ideas revoltosas en contraste con las de Trina, pero con una común inquietud: escribir. Un día, una muchachita, tímida y respetuosa, la obsequia con un libro que había escrito y después editado con medios económicos propios. “¿Para mí?” Al leer la dedicatoria Trina no tiene más remedio que emocionarse: “A mi maestra, que llevada de la generosidad de su talento me ha enseñado todo lo que sé como novicia en el arte de escribir”.

“Mi siembra”, era el título de aquel librito al que Trina definió después de leerlo por primera vez como “narraciones tejidas con susurrante sensibilidad y dulzor de ternura”. Desde entonces lo ha conservado como algo muy valioso guardado en el cajón de su mesita de noche y, al releerlo a la luz de la lamparilla, ha encontrado siempre en él a un buen amigo que le ha llevado bellas visiones y consuelo en las horas en que el sueño se empeña en no llegar.

Impulsada por la certidumbre de la vocación de la muchacha, Trina quiso proteger a la escritora novel e intentó ayudarla de un modo eficaz e inteligente: “Sé constante. Escribe al menos una hora diaria. No dejes de hacer muchas lecturas. Alterna estas disciplinas con el cultivo de la armonía, el equilibrio y el criterio propio. Te recuerdo que para escribir prosa o poesía resultan más eficaces que mil lecciones de literatura las cosas aprendidas de la rutina cotidiana llena de lecciones sagaces y donde podrás encontrar las distintas caretas de tus personajes; la observación de la naturaleza en sus infinitas variaciones te permitirán descubrir la belleza de las noches de verano y los diferentes pequeños rumores de la vida estival; ver el vuelo de la golondrina presagiando la llegada de la primavera; la delicadeza del cáliz de una flor inundado por una gota de rocío; y hasta el mar, con su misterio, tendrá para ti secretas confidencias… Todas estas imágenes recogidas por tus sentidos te ayudarán a escribir”.

Acaso el más ferviente deseo de Trina haya sido el de que aquella muchacha  hubiera llegado a cumplir sus sueños de juventud, volcando sobre cuartillas en blanco, con gracia y poesía, la visión de las cosas y toda la fuerza de su propio ser, de su alma singular. No fue así. Lo que anhelaba entonces no lo consiguió. Un día conoció el amor, y con él su séquito de dolores y alegrías; el cariño incomparable hacia los hijos ocupó todo su corazón; los deberes de su vida real, todo su tiempo. Nunca más visitó a Trina. Fue el destino, que todo lo quita y lo pone, quien desgraciadamente le prohibió volver a escribir.



Cuando Trina se asoma a la magia engañosa y profunda de un espejo y contempla su imagen poco halagüeña reflejada en la superficie de cristal, siente cierta desilusión personal. Se puede decir realmente que esa imagen es de una mujer que no es ni bonita ni fea; ni joven ni vieja, aunque hace tiempo transmontó el medio siglo de vida. Su figura es de pequeña estatura, la cabeza más bien grande, algo cortas las extremidades y constitución fuerte y regordeta. Su cara de luna llena, el perfil un poco chato y la boca ancha de labios finos, no es el tipo de belleza que nos han enseñado a admirar, pero su rostro tiene cierto encanto.  Son sus jaspeados ojos los que parecen atraer con su mirada y contrastan con sus cabellos cortos, lacios y oscuros, estriados de gris; esta imagen inmóvil, en pose para ser retratada, cuelga dentro de un marco en una de las paredes de la habitación donde ella teclea en la máquina de escribir.              

¿Cómo es Trina en su interior? Su alma, honda y limpia, armoniosa, posee la medieval alquimia de transformar en encantamiento y fascinación todo lo vulgar y lo aprehensible. En el fondo Trina no es romántica porque conoce la vida a través de muchas pruebas crueles. En su laberinto interior, en momentos de pugna entre la esperanza y el desespero, a veces se siente sola, perdida, como olvidada del mundo, y es siempre la lectura de un libro quien la consuela.  

¿Amores? Uno que dejó huella en el corazón de Trina. Amor juvenil: sueños que iluminan la vida de una mujer, murmullo de palabras que la timidez impide pronunciar, rápidos latidos del corazón, el halago del obsequio de una rosa o de una humilde margarita, el paseo bajo las estrellas que encienden el firmamento y protegen a los enamorados, manos entrelazadas sintiendo el tibio cosquilleo de los dedos del otro en la palma, el rugido de la sangre ante el primer beso…  La inesperada ruptura planteada por él, causó en Trina una larga desorientación aunque ha conservando a través de los años la fotografía del amado entre los recuerdos más importantes de su vida.

Trina está convencida de que ella es de esa clase de gente incapaz de sentirse contenta; una mujer enteramente egoísta que alberga ideas muy suyas sobre los principios liberales que gobiernan su vida, en la que muchas son las cuestiones importantes ante las que se muestra indiferente y sarcástica, mas una vez decidida a seguir un camino, resulta inútil querer disuadirla. Cuando menos, se dice, sus decisiones son suyas. Tal vez resentida por el desengaño que sufrió, todo lo que entraña sexo o, incluso, los dolores del parto, son como una especie de servidumbre que la mujer tiene que aceptar.  

Un día, hace muchos años, Trina mete cuidadosamente en un sobre unos manuscritos con un compendio de sus relatos y poemas, va a Correos y certifica el envío. Adjunta va una carta dirigida a un escritor de cierta fama, profesor en la Universidad. En ella le ruega tenga a bien leer sus trabajos y, después, dar su veredicto. El hombre sí contestó, al cabo de dos meses y con una amarga crítica condenatoria: los relatos resultan tímidos y pueriles; los poemas, desalentadoramente incultos. Lectura oportuna sólo para mujeres. Al mismo tiempo le brinda con indiscutible malicia un consejo: “No persiga una quimera inútil, dedique sus horas a labores de zurcido y a trabajar entre fogones y pucheros, deberes propios de una fémina, deje las inquietudes intelectuales para los hombres. Una mujer con ideas propias equivale a un montón de despropósitos. De esto no hay duda alguna.”

Ante esta condena, Trina llora; de rabia, de humillación. Se siente herida y al mismo tiempo conmovida por todas las mujeres y en vez de encerrarse en un mundo de silencio y de resignación, decide continuar escribiendo incesante e intensamente como medio para luchar contra las injustas marginaciones.

       

Los días son casi siempre grises en el frío mañanero del otoño y del invierno. Trina continua escribiendo delante de la ventana. Lo hace con entusiasmo porque piensa que tiene un argumento interesante para su nuevo relato.  La vida está llena de alicientes. Vale la pena seguir aquí, en este mundo. El mañana está muy lejos, no tiene que preocuparse. Repentinamente, le asalta con fuerza el pensamiento de que se está volviendo un poco infantil y que la gente empieza a seguirle la corriente. No puede quedarse holgazaneando cuando todavía le queda tanto por hacer… Entonces, mentalmente echa una ojeada a todo cuanto le ha acontecido a ella misma y a todo lo que ha sucedido a su alrededor. Con la sensación del que está convencido de que el tiempo se aleja para siempre, sin perder un instante se pone a trabajar, tecleando con frenesí en su máquina de escribir, envuelta en un torbellino de ideas y de conceptos, hablando para sí misma en un murmullo bajo, entrecortado y abstraído, narrando lo que va escribiendo. De vez en cuando exhala un suspiro profundo y plañidero, que significa que está algo cansada.

 El otoño y el invierno en algunos aspectos son unas estaciones tan deseables, pero tienen sus desventajas. ¡Hace tanto frío para un viejo!

                                      Alicia González Díaz –  Granada, 1984



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jueves, 16 de junio de 2016

Trina Mercader poeta


Trinidad Sánchez Mercader (24 de marzo de 1919, Alicante – 18 de abril de 1984, Granada), conocida en el mundo de la poesía y de las revistas literarias como Trina Mercader fue una poeta española y fundadora y directora de la revista literaria Al-Motamid​.

Llegada la posguerra, que trajo consigo necesidades y penurias, situación difícil para todos, pero especialmente para una joven dinámica, culta y con la natural ambición de llegar a ser una periodista “libre”, dejó su tierra natal y se marchó a Larache (Marruecos) en 1940, junto a su madre.
 Trina se enamoró de la ciudad que por entonces, estaba en plena efervescencia; le atrajo y sorprendió el sistema de convivencia intercultural que allí se vivía, su luz, sus jardines y el mar Atlántico. Inmediatamente, comprendió que era aquí donde quería vivir. Consiguió un puesto de trabajo en la Junta Municipal. Su cultura y simpatía, pronto le hacieron merecedora del aprecio de todos.
     Su vida discurrió de forma apacible y esto le permitió continuar su formación, que desde el comienzo fue autodidacta. Mucho tuvieron que ver las relaciones con intelectuales de la zona del Protectorado Español,.
    Trina padecía una enfermedad en la piel, y ella era consciente de la gravedad que vivía, esto hizo que se involucrara, cada vez más, en su trabajo, tratando de enmascarar sus miedos. Fue una mujer que necesitó estar siempre en activo. Por tanto, se marchó a Tetuán y escribió su primer poemario con el seudónimo de Tímida, Pequeños poemas (1944).
    Impulsó la salida de la revista Al-Motamid. Versos y prosa (1947-1956), de la que fue directora, junto con la colección de poesía “Itimad”, donde publicó su segundo poemario Tiempo a salvo (1956).
     Ya en 1956,  Trina decidió trasladarse a Granada. Allí continuó escribiendo poesía aunque cada vez más sus colaboraciones tendieron a desaparecer y sólo el interés de unos pocos amigos que  la animaron a publicar; muestra de ello es el último poemario publicado, Sonetos ascéticos (1971).
    Murió en 1984. Decidió que todo lo que ella poseía lo legaba a la “familia” granadina que la cuidó con tanto cariño, durante tantos años.




  Desde lejos,
me están avisando a gritos:
que no vaya, que no venga,
que no me mueva del sitio.

     Que es aquí
donde nacerán los lirios.

     Aquí,
conmigo.

     Y me miro.
Y este sembrado que soy
apenas está movido.
Apenas asoma el aire
la promesa de los trigos.

     Y quiero andar. Y de nuevo
las voces que el aire trae
me están gritando lo mismo:

     que no vaya, que no venga,
que no me mueva del mundo
que estoy sosteniendo en vilo.

.::
 
     Mayo de los amantes,
madurador de labios, nuevo fruto,
cómo rebosa el agua de mis ojos en sombra
por donde las estrellas calan en lo profundo.

     Mi voz está volcando
su cesto de manzanas en júbilo.

     Tacto de la caricia,
mira cómo renace la yerba en mis dedos.

     Y este ritmo en desorden que el corazón ordena,
pone en fuga las aves del desnudo en que bebes
agua ciega del beso : verbo mudo.

     Mayo de los amantes,
enamoradamente te descubro.

.::

     Sobresaltada la lengua,
¿quién va a decidir el hallazgo?

     Una vocación de síes
está inundando el espacio.

     Carne de fe, sangre nueva
contra todos los escarnios,
afirma otra vez en pie
la alegría de sus tallos.

     Un brote que nadie quiso,
que nadie esperaba, canto.

     Vocación afirmativa
–carne y sangre del hallazgo–
no hay muerte para morir
lo que está resucitando.

     Que nadie diga que no,
que está el alma a flor de piel
naciendo de su milagro.

---
Tomado de POESÍA femenina española (1939-1950) ANTOLOGÍA de Carmen Conde. Libro Clásico Bruguera, Barcelona, España, 1967


Un día, hace muchos años, Trina mete cuidadosamente en un sobre unos manuscritos con un compendio de sus relatos y poemas, va a Correos y certifica el envío. Adjunta va una carta dirigida a un escritor de cierta fama, profesor en la Universidad. En ella le ruega tenga a bien leer sus trabajos y, después, dar su veredicto. El hombre sí contestó, al cabo de dos meses y con una amarga crítica condenatoria: los relatos resultan tímidos y pueriles; los poemas, desalentadoramente incultos. Lectura oportuna sólo para mujeres. Al mismo tiempo le brinda con indiscutible malicia un consejo: “No persiga una quimera inútil, dedique sus horas a labores de zurcido y a trabajar entre fogones y pucheros, deberes propios de una fémina, deje las inquietudes intelectuales para los hombres. Una mujer con ideas propias equivale a un montón de despropósitos. De esto no hay duda alguna.”

Ante esta condena, Trina llora; de rabia, de humillación. Se siente herida y al mismo tiempo conmovida por todas las mujeres y en vez de encerrarse en un mundo de silencio y de resignación, decide continuar escribiendo incesante e intensamente como medio para luchar contra las injustas marginaciones.  (Alicia González Díaz –  Granada, 1984)


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domingo, 17 de abril de 2016

Laila Alaoui fotógrafa y videoartista



Leila Alaoui (en árabe: ليلى علوي; en tifinag: ⵍⴰⵢⵍⴰ ⵄⴰⵍⴰⵡⵉ) (París, 10 de julio de 1982—Uagadugú, 18 de enero de 2016) fue una fotógrafa y videoartista franco-marroquí.

Leila Alaoui nació en París, de padre marroquí y madre francesa, y se crió en Marrakech, Marruecos. Durante su infancia y adolescencia, fue expuesta regularmente a las historias trágicas de inmigrantes que se ahogaban en el mar, mientras realizaban viajes peligrosos, que interpetró como historias de injusticia social.
Cuando cumplió 18 años, se mudó a Nueva York para estudiar fotografía en la Universidad de la Ciudad de Nueva York. Luego regresó a Europa antes de regresar a Marruecos en 2008, viajes regulares a Beirut y París.
Uagadugú  enero de 2016

Consideró que la fotografía y el arte podían ser utilizados para el activismo social, optando por centrar su trabajo en las realidades sociales, de identidad nacional y diversidad cultural, la migración y el desplazamiento forzado. Para ello, utilizó imágenes de creación, reportajes y videos. Una de sus técnicas de uso común fue la de establecer un estudio portátil en un lugar público como una plaza o un mercado e invitar a los transeúntes interesados en ser fotografiados. Críticos de arte describieron su trabajo como «post-Oriental», en referencia a la teoría de Orientalismo propuesta por Edward Said.
Su trabajo fue exhibido en la Bienal de Marrakech en Marruecos en 2012 y 2014, Art Dubai, y en Nueva York, Berlín, Beirut, Túnez, Luxemburgo, Argentina, Países Bajos, España y Suiza. Sus fotos se han publicado en The New York Times y en la revista Vogue. Su obra forma parte de las colecciones del Museo de Qatar y de la Société Générale. También realizó tareas para el programa de televisión español El Mago
 En 2013, fue comisionada por el Consejo Danés para los Refugiados para crear una serie de retratos de refugiados en el Líbano.
En 2013, creó una videoinstalación titulada Travesías, que describe los viajes de los marroquíes que viajan a Europa. Se exhibió en el Museo de Fotografía y Artes Visuales de Marrakech en 2015, y en el Festival de Video de El Cairo en 2015. Las fotografías del proyecto se expusieron en la Semana de Arte de Luxemburgo en noviembre de 2015, y en la Casa Europea de la Fotografía (MEP) en París en 2015-2016, como una exposición titulada Los marroquíes. También formó parte de la primera Bienal de Fotografía en el Mundo Árabe contemporáneo, celebrada en París en 2015.
En 2015, completó un trabajo fotográfico titulado héroes diarios de Siria, en el Líbano, Jordania e Irak, centrándose en los sirios que viven en los asentamientos de refugiados. El proyecto se completó para el Consejo Danés para los Refugiados, la Comisión Europea para la Ayuda Humanitaria y el departamento de Protección Civil y ActionAid International
Uagadugú 13 de enero de 2016

Fallecimiento
En el atentado en Uagadugú del 15 de enero de 2016 se encontraba en un coche frente al restaurante Capuccino cuando se produjo el ataque y recibió varios disparos en el pecho y sus piernas, quedando gravemente herida. Se encontraba realizando una misión para Amnistía Internacional, fotografiando sobre los derechos de las mujeres en Burkina Faso, desde una semana antes del atentado. Fue trasladada rápidamente al hospital Notre Dame de la Paix de la ciudad, donde falleció tres días más tarde por un ataque al corazón a raíz de sus heridas. Tenía 33 años de edad.También falleció su conductor Mahamadi Ouédraogo, dentro del vehículo donde se encontraba a raíz de los disparos recibidos.
Sus restos fueron trasladados a Marruecos a expensas del rey Mohammed VI de Marruecos, donde fue enterrada en el cementerio de dicha ciudad el 19 de enero.24 25 26 El director de la Casa Europea de la Fotografía (MEP) y el presidente del Instituto del Mundo Árabe hicieron una declaración conjunta alabando su trabajo dando «voz a los sin voz» y diciendo que era «una de los fotógrafas más prometedoras de su generación».


Uagadugú 12 de enero de 2016

Muere en un atentado en Burkina Leila Alaoui, la fotógrafa más prometedora del momento 23/01/2016

Apenas tenía 33 años, pero su nombre se pronunciaba con reverencia, promesa hecha realidad, la fotógrafa más prometedora de su generación, capaz de hundirse en los peores conflictos del mundo para gritarlos y de mezclarse con personajes famosos, de la moda o el deporte, siempre tratando de 
exprimir su esencia.

Leila Alaoui, la fotógrafa joven más aclamada del momento, fue asesinada la pasada semana en un ataque terrorista que dejó otros 29 muertos en el hotel Splendid de Ouagadougou, la capital de Burkina Faso. Era el recinto, supuestamente seguro, donde se daban cita los internacionales y el personal de la ONU. Pero Al Qaeda en el Magreb Islámico reventó sus muros, primero con un coche bomba y luego con un intenso tiroteo y el secuestro de más de cien personas.

Alaoui estaba allí haciendo uno de sus trabajos de denuncia, esta vez para Amnistía Internacional, retratando a mujeres trabajadoras. Se encontraba aún fuera del recinto, junto con su conductor, Mahamadi Ouédraogo, cuando se vieron rodeados de disparos. Iban a cenar. El hombre murió en el acto. La joven falleció en un hospital, tras estar dos días tratando de superar sus graves heridas en piernas y torso. Llegó a estar consciente, a hablar con su familia, pero no pudo superar el último ataque al corazón.

Alaoui, nacida en Francia y criada en Marruecos, se había convertido en un ejemplo de la mujer árabe "sin ataduras, con presencia en el mundo del arte, una visionaria que trataba temas como la inmigración o los derechos de la mujer", como ha afirmado su prima Yalda Alaoui al diario británico The Independent, justo tras el entierro de la periodista en Marrakech (Marruecos), un sepelio al que acudieron más de mil personas, muchas de ellas mujeres, sin velo, sin miedos.

Alaoui estudió en la Universidad de Nueva York y su trabajo fue recientemente presentado en la Casa Europea de la Fotografía en París, donde aun era visitable en el momento del atentado. Sus imágenes se han expuesto en todo el mundo. Era una habitual en publicaciones de referencia como The New York Times y Vogue. Las fronteras, las razas, las religiones, las diferencias de sexo, fueron siempre el eje de su trabajo.

"Era joven, era hermosa y tenía talento", han dicho Jean-Luc Monterosso, director de la Casa Europea de la Fotografía, y 
Jack Lang, presidente del Instituto del Mundo Árabe, en un comunicado conjunto en Facebook. "Era una artista radiante. Luchó para devolver la vida a la sociedad del olvido, a las personas sin hogar, a los migrantes, con la fotografía como su única arma. Ella fue una corresponsal de la paz", abundan. En España su trabajo saltó a la luz por uno de sus trabajos más festivos: los retratos que le hizo a Neymar, el jugador del FC Barcelona.



Uagadugú 12 de enero de 2016

Mi querida, Leila Alaoui, aterrizó en Casablanca, al mismo tiempo que lo hacía yo, llena de ilusión para emprender proyectos culturales de la mano de una equipo de "fabricadores de la cultura" que le brindaron la oportunidad de desarrollarse como fotógrafa. En Marruecos le hacían sentir una extranjera, algo que no soportaba porque su corazón siempre estuvo en Marraquech...y en Francia la catalogaron como la "árabe". "Para mí es una riqueza disponer de la doble nacionalidad franco-marroquí y vivir entre dos pueblos y culturas", siempre decía...A partir de este momento se interesó por fotografiar el complejo mundo de las identidades que, en algunos casos, ha conducido a más de uno hacia derroteros extremistas. Recuerdo a Leila, incansable y enérgica, llegando a casa desesperada porque el resultado final de sus espléndidos retratos no le satisfacían. Siempre exigente, le pedía a Jamal una crítica para mejorar su obra. Se quedaban horas visionando y editando. Entre sus primeros trabajos, retratos de inmigrantes subsaharianos y le fascinaba la mujer tradicional. De ella, recuerdo su estilo "cool" en negro y su gran melena que contrastaba con su color de piel, muy blanquita. Leila te queremos, Allah está contigo.Beatriz Mesa

Uagadugú 13 de enero de 2016
Las fotos que se muestran fueron realizadas dos o tres días antes de que fuera asesinada . Estamos seguras de que Laila estaría muy feliz con este trabajo en que muestra a unas mujeres valientes y valiosas. GRACIAS LAILA POR LA RIQUEZA DE LO QUE NOS HAS DEJADO ! CELEBRAMOS TU VIDA !  Nos apoyamos en tu trabajo para seguir luchando por la igualdad .

http://www.amnesty.ca/blog/early-and-forced-marriage-burkina-faso
http://www.leilaalaoui.com/
https://www.facebook.com/leilaalaouiphoto
http://www.huffingtonpost.es/2016/01/23/leila-alaui-atentado-burkina_n_9048664.html
https://es.wikipedia.org/wiki/Leila_Alaoui
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